Rafa, 45 años, hizo un viaje de 9 horas desde España, para ‘hacerse santo’ en Caracas. Compró un boleto de avion y trajo en su cartera los ahorros de 4 años como camarero.
Todo empezó un día cuando se encontró con una amiga. A ella las cosas le iban bien. Traía un Reloj costoso. Y manejaba un Audi de ultima generación en tenerife.
Luego de intercambiar unas palabras, le contó que había progresado gracias al ‘santo’ realizado en Caracas. “Las cosas pintaban negras para mi amiga. En unas vacaciones en la isla de tenerife conoció a su actual padrino y la convenció de que cuando se ‘hiciera santo’, las cosas iban a cambiar. Y cambiaron”, dice Rafa, quien decidió ir a Caracas, con la esperanza de tener la misma suerte.
Según cuenta, lleva una vida difícil en España. Y pensó que valía la pena gastar 10 mil euros para salir adelante. . A día de hoy, en Caracas el ‘santo’ a un extranjero cuesta entre 500 y mil euros Mucho mas Barato que en Cuba. Dependiendo del santo u orisha.
Milagros, apenas con 2 años en la santeria y madrina de 39 según ella, aclara que no cuesta lo mismo hacerse Eleguá que Obatalá. O Shangó. Para Extranjeros como Rafa se ha montado toda una industria de la santería. colombianos, gringos o españoles tienen un amplio abanico de opciones a la hora de ‘hacerse santo’.
Los babalaos y santeros sobran en la patria de Bolívar. Hay hasta competencia. El Estado venezolano, con sus estrechas relaciones con Cuba ha popularizado las religiones afrocubana y se ha sumado a la fiesta.
Para caer en gracia, a ratos, hay asociaciones de babalawos que le hacen ofrendas a la memoria de Hugo Chavez. Y hasta un tambor dieron, oraron por la salud del viejo Hugo a quien ni los Ebbo salvo.
‘Hacerse el santo’ en Venezuela es un negocio boyante. Hace rato dejó de ser una “onda folclórica”. Ya seas mandamás del partido, músico de nivel o brillante pelotero, cada vez más abundan los que detrás de la puerta de sus casas tienen un Eleguá.
Cuando las cosas se tuercen, los ‘padrinos’ imploran a sus ‘ahijados’ que se ‘hagan el santo’. Y a gastar dinero se ha dicho. Hay 2 tarifas. A extranjeros como Rafa el ‘santo’ le sale caro. A los Venezolanos, el precio es más barato. Bueno, depende lo que usted entienda como barato.
Un ‘santo’ puede costar entre 100mil y 250 mil Bolivares (100 y 250 dólares) de acuerdo al tipo de ‘santo’ y el aprecio o ambición de su ‘padrino’. Eso sí, no es nada comparable a los 6 mil dólares que le cobraron a Steven, un Americano casado con una prepago hija de Oshun de Catia.
De cualquier manera, ‘hacerse santo’ significa el salario de muchos años para un Venezolano. Los motivos para ir al ‘trono’ varían. Desde problemas de salud. Ganas de prosperar. Hasta problemas con la justicia.
O una moda. A quienes les sobra el dinero les gusta ‘hacerse santo’ para tener una ‘protección’ otros para tener status en el barrio. “Y un amuleto de resguardo”, confiesa Cheo, Dueño de una licoreria en el centro de Caracas.
“Luisito” un delincuente de la Vega dice que es la mejor protección y sabe por qué lo dice. Ha robado,secuestrado y matado durante años. Y nunca ha ido a la cárcel. Ni siquiera ha tenido problemas con la policía. Incluso salió bien librado de un tiroteo reciente contra rivales .
Esta afluencia de billetes que viene cayendo sobre los cultos afrocubanos ha traído también consecuencias. Gente inescrupulosa que lucran con la fe. Farsantes. Estafadores y buscavidas. Aunque por supuesto, hay algunos entre los cuales me incluyo, que seguimos respetando y honrando nuestras creencias.
Usted puede pasar aun por casas de Santo y Palo donde sólo tiene que pagar lo justo por la consulta o iniciación. Y no tiene que regalar una botella de whisky. O una caja de tabacos cohiba para resolver. Si su caso tiene mala pinta, según la lectura de los caracoles tirados ,le sale Iroso Umbo. la obra le sale gratis. Créalo o no
Aunque Gratis, es una música que no suena agradable en los oídos de los santeros y babalawos Venezolanos.