Me fui de mi munanso y mi muerto ya no camina

Me llegó un mensaje directo hace unos días «Saludos Tata, estoy buscando en Google «Palero en Marbella» y me salió su página, tengo una situación, le cuento: me fuí de mi casa de palo hace unos años, de hecho me hice santo en otro ile, desde entonces el muerto no camina»

Respondo:

En el #PaloMonte la #unganga, prenda o fundamento es el eje central del culto y es donde el Padrino le otorga a sus ahijados “nacidos de ese fundamento” las potestades o licencia de la #magia.

Todo esto lleva implícito la capacidad del ahijado de “tener licencia” para poder hacer uso de esa “Potestad” en los ritos mientras exista esa simbiosis Padrino – Ahijado o Unganga.

Desde hacer trazos, prender una vela, fabricar pólvora, etc siempre y cuando esté bajo la sombra de la #nganga y aún no posea la de él. ¿Qué pasa cuando se rompe esa cadena de vibración y la relación con el padrino?

Si el ahijado reniega de su padrino, por el motivo que sea (los espíritus no entienden de motivaciones humanas y se rigen por leyes ancestrales) o viceversa, de rompe ese vinculo mágico e inmediatamente el ahijado pierde todas esas facultadas, su padrino/maestro tiene la potestad de revocar esas licencias. En #Cuba un acto de esta naturaleza antaño era mal visto y los muna-nso serios y respetados se abstenían de acoger a un ahijado que estuviera en “guerra” con su padrino ¡por lo que pudiera pasar! y en algunos casos es bien conocidos que hermanos de un mismo muna-nso asesinaban al ahijado traidor. Hoy en día sin embargo es común ver a mayomberos indecisos o poco éticos “saltar la tierra” sin ningún motivo de desavenencia con el padrino, otros por el contrario por motivos justificados rompen la relación con el padrino o viceversa, pero en ambos casos se cumple el mismo principio, «la ruptura del vinculo vibratorio». Y el ahijado dependiente siempre de una vinculación con el mundo de los antepasados está obligado a acogerse a otro linaje para reconstruir esa conexión con el “mundo invisible”. Quien no acata esta norma es un Baracutey como dirían los congós afrocubanos un individuo sin tierra “buey suelto” en el argot cubano y sin ninguna licencia, incapacitado para ejercer cualquier acto de #Mayombe que haya sido dispensado por el anterior padrino.. He aquí probablemente lo que te pasa.

Un comentario en «Me fui de mi munanso y mi muerto ya no camina»

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